viernes, 25 de noviembre de 2011

¡Hasta las narices!

Me he desayunado hoy con una noticia que me ha soliviantado. Decía el titular "Blanco abandona la primera línea política". He de reconocer que prácticamente todo lo que hace o dice este señor me enerva. Me enerva que alguien cuyo único mérito ha residido en ser un buen lacayo o señor de su amo haya llegado adonde está como pago a los "pequeños" favores que, sin duda, ha realizado a lo largo de toda su vida como fontanero del partido. Me enerva que alguien que ha sido incapaz de acabar una carrera, a pesar de tener la oportunidad de hacerlo, pontifique sobre tantas cosas sin el menor asomo de vergüenza ajena con ese tono engolado propio del que no ha asumido todavía su cambio de estatus social y pretende venderlo cada vez que habla. Thank God, Pepiño, it is time for you to eat humble pie!

Pero, en fin, no quiero hablar tanto sobre el Sr. Blanco como de lo que representa. Con el titular que mencionaba se comenta más adelante en el artículo que el Sr. Blanco deja todos sus cargos internos e institucionales. Lo primero que habría que decir es que, más que dejarlos, creo yo que le han echado a patadas sus militantes y sus votantes. Ahora bien, lo que ya me parece un auténtico fraude es decir que abandona la primera línea de la política pero conserva el escaño. Sin querer entrar en los verdaderos motivos que pueden estar detrás de esta decisión (caso Dorribo y su aforamiento), ¡hasta qué punto se ha pervertido la política que resulta que seguir siendo diputado es estar en un segundo plano!

Y yo me pregunto, ¿hay algo más importante en política que legislar, controlar al gobierno y representar los intereses de los ciudadanos?. Pues parece que sí, es más importante estar en la pomada partidaria, en el mamoneo de favores y comisiones, en el te doy esto pero me das aquello o en el si me apoyas te garantizo que ... ¿es esto lo que llaman los pretenciosos y horteras la POLÍTICA CON MAYÚSCULAS?. No, Pepiño, no dejas la primera línea de la política, pero como no crees que ser diputado sea estar en primera línea, ¡DIMITE!

Vale.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

La intifada siria

Se veía venir. En el verano de 2007 tuve la ocasión de visitar Siria. Fue un viaje que dejó una huella profunda tanto en mi como en mi mujer y en mis hijos. Recorrimos el país prácticamente en su totalidad, con un guía, un conductor y una van. Tuvimos ocasión de conocer Damasco, el desierto con el enclave de Palmira, las ciudades en las orillas del Éufrates, en especial la ciudad de Dair az Zawr, la frontera con Iraq, el llamado Syrian Sea (en realidad un embalse), Aleppo y la zona fronteriza con Turquía, la costa (la poca que les queda después de la anexión de la región de Antioquía por los turcos), Hamah, Homs, Bosra, en la frontera jordana, etc... Fue casi un mes de inmersión en una cultura completamenge diferente (antes ya había estado en algún país árabe, pero de forma muy circunstancial). En aquel momento Siria era un país segurísimo. En una ciudad como Damasco, de 5 millones de habitantes, uno podía caminar por la calle tranquilamente a cualquier hora del día o de la noche sin sufrir sobresalto alguno, ni siquiera el tradicional "acoso" de vendedores ambulantes y niños a que se ven sometidos los turistas en muchos de los países árabes. La clave de la seguridad estaba en la infiltración policial de la población. Era lo que se conoce como un estado policial. Nuestro guía, un sirio de origen otomano y cristiano, acostumbraba a decir metafóricamente que el régimen sirio era como un mástil con una espada girando en lo alto del mismo, de forma que quien levantaba la cabeza, corría el peligro de quedarse sin ella. Para colmo, continuaba Eduard con la metáfora, la espada que giraba en lo alto también bajaba al mismo tiempo, de forma que arrastrarse por el suelo constituía la forma más segura de supervivencia. Era, por lo tanto, un país seguro y era, además, un país en el que las minorías religiosas y étnicas podían sentirse respetadas, dentro de una sociedad mayoritariamente árabe y musulmana.

Parece evidente, sin embargo, que la "primavera árabe" ha puesto de manifiesto el hartazgo de la mayoría de la población ante un régimen que les subvencionaba la pobreza y que les aportaba el enemigo ideológico fuente de todos los males (el sionismo y el Estado de Israel) pero que, al mismo tiempo, les imponía grandes cortapisas a sus libertades políticas y personales. Era muy revelador, comprobar como, a pesar de la abundancia de canales de TV, merced a la presencia masiva de antenas de comunicaciones vía satélite, buena parte de las personas con las que pudimos establecer contacto se mostraban ávidas de información sobre manifestaciones culturales occidentales a las que no tenían acceso o que directamente estaban prohibidas o, en otro orden de cosas, comprobar la ausencia total de libros (salvo el Corán) en la librerías.

En fin, es una pena que un país, que ha sido cuna de la civilización (es impresionante el patrimonio arqueológico, con cientos de yacimientos abiertos) y  tierra de paso y acogida, dé muestras en sus gobernantes de semejante falta de humanidad y que esté abocado a una guerra civil que, por todos los medios, están intentando evitar sin cumplir el único deseo del pueblo que es que se vayan.


Muestra de arquitectura Armenia


una de las famosas norias de Hamah

Anfiteatro de Bosra

Gran mezquita de Aleppo (pabellón de los ciegos)

martes, 8 de noviembre de 2011

¿debate o de váter?

Con toda franqueza, tengo que confesar que, durante el yo soy y tú más de Rajoy y Rubalcaba, fui incapaz de no sucumbir a los efluvios de las hadas del sueño por más que intenté renovar mi interés. Si esto fue un debate que viniera dios y lo viera. Para empezar, la agenda estaba pactada: de esto hablamos, de esto no hablamos. Evidentemente dejaron de hablar de más cosas de las que hablaron y en éstas, la verdad, tampoco entraron a fondo. Uno a no perder, el otro a ver si podía meter baza. Ni que decir tiene que la aportación del ínclito Campo Vidal a mi somnolencia también fue importante. Yo no sé por qué razon este señor tiene tan buena prensa ni de dónde ha salido esa cosa pomposa y antitética en sus términos que llaman Academia de la Televisión. Ante tanta estolidez (falta total de razón y discurso) creo que hice lo único que podía hacer, tirar de la cadena y ponerme a visionar el combate, este sí, por el título mundial del peso superwelter entre Coto y Manny Pacquiao que ganó este último.

sábado, 5 de noviembre de 2011

¿Para cuándo?

Uno puede entender que, en estos tiempos, los partidos políticos no precisen demasiado sus programas electorales. Todos sospechamos que quien gane las próximas elecciones del 20-N, previsiblemente el Partido Popular, va a acometer una drástica reducción de los costes de la Administración General del Estado y de sus Autonomías. La cuestión es saber el cómo. Seguramente, dicha reducción se hará esencialmente a costa de los ciudadanos a través de una reducción, todavía más, de nuestro, ya de por sí nimio, estado del bienestar (¡cómo se ha abusado de este término!) y, al mismo tiempo, se pretenderá que lo que quede del mismo requerirá mayores ingresos para sostenerlo. Esto, sin duda, conllevará un aumento de las cargas que soportamos los ciudadanos (subida del IVA, de tasas de todo tipo, copago de servicios públicos, etc.) combinado con un escenario de contención de los salarios; en definitiva, todo esto supondrá un empobrecimiento general. Se podría argumentar que, para empezar, lo que disfrutábamos antes de la crisis no correspondía, y estaría de acuerdo. Pero, entonces, ¿por qué los políticos de todos los colores (nuestros gestores), permitieron tal despilfarro? ¿por qué debemos conformarnos con que sean los mismos, parte de la misma casta, los que nos van a sacar del atolladero?. Me gustaría que alguien, de una vez, incluya en su programa medidas concretas sobre:

- la exigencia de resultados y rendición de cuentas de nuestros políticos

- la inhabilitación de por vida de los corruptos

- la eliminación de sus privilegios

- la eliminación, previa a los recortes que afectan a todos los ciudadanos, de los gastos suntuarios y de representación del Estado y sus Autonomías y Ayuntamientos

En fin, permaneceremos vigilantes.


The sooner ... the better

viernes, 4 de noviembre de 2011

Música del blog de mi amiga Montse

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tintimám "em colaboraçom": Variaciones

Chequia es España

Hace unos días escribí una entrada en el blog (Democracia a la española) en la que trataba de poner de manifiesto algunas de las contradicciones de nuestro sistema. Esta mañana  he leído un artículo en The Economist sobre la República Checa en el que si se cambia la palabra Chequia por España el 100% del artículo seguiría siendo válido. Esto me lleva a pensar en que nuestra transición política, tan alabada desde dentro del propio sistema político y tan sobrevendida como un ejemplo a aplicar en otras partes del mundo, ha sido, en realidad, un bluf. Efectivamente ha sido un ejemplo, pero de todo lo que no se debe hacer. El resultado está a la vista: una casta política que gobierna de acuerdo con sus intereses y, supuestamente, en beneficio del pueblo. Esto podría interpretarse como una revisión del Despotismo Ilustrado del S. XVIII, lo cual todavía tendría un pase si, como entonces, fuese la élite de la sociedad la que gobernase. Muy al contrario, lejos de ser la élite social, los que nos gobiernan son, en muchos casos, los menos preparados que han llegado adonde están por mera inercia partidista.

En fin. quien iba a decir que España tendría un nuevo Imperio y que Chequia formaría parte del mismo!!!

Ver artículo en

martes, 1 de noviembre de 2011

UNCUT MAGAZINE Music Awards shortlist

Acaba de publicarse la lista final de los prestigiosos premios de Uncut Magazine

Bill Callahan – 'Apocalypse'
Fleet Foxes – 'Helplessness Blues'
PJ Harvey – 'Let England Shake'
Bon Iver – 'Bon Iver'
Josh T Pearson – 'Last Of The Country Gentlemen'
Radiohead – 'The King Of Limbs'
Paul Simon – 'So Beautiful Or So What'
Gillian Welch – 'The Harrow & The Harvest'

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