Verdaderamente creo que el sistema judicial español, en especial su pieza clave, los jueces, es un desastre. Que un juez, a estas alturas, esgrima que no hubo violencia en las actuaciones de Nanisex es una aberración. Lo que hubo fue la máxima expresión de la violencia: aproveharse de la indefensión de un niño de dos años. ¿En qué mundo vive el juez en cuestión? Argumentará que la sentencia ha sido modélica y que se ha condenado a la bestia a 58 años. Eso, además, le da derecho a explayarse en una motivación de la sentencia hecha a mayor gloria de su persona con disquisiciones del tipo "no hubo agresión sexual (violencia) ya que sus víctimas eran incapaces de defenderse o de comprender lo que les estaba pasando". Esto es, más allá de si el Código Penal castiga adecuadamente este tipo de delitos, lo verdaderamente grave, porque pone de manifiesto el perfil netamente narcisista de nuestros jueces. Es decir, la culpa es de los niños. Como no comprenden, no se defienden y, voilà, como no hay refriega, no hay violencia, aunque los tiren por un precipicio.
¡¡¡Entérense señores (especialmente) jueces!!!, no necesitamos sus interpretaciones de la Ley, sólo que la apliquen con sabiduría y sentido de la justicia y si el castigo no es suficiente, exijan que las leyes se cambien por quienes tienen que hacerlo: los políticos. Aunque esa es otra historia ...
